Ubicación:
- Debes cerciorarte de que el inmueble no esté situado en una zona de riego o vulnerabilidad. Es recomendable investigar los accesos, vías públicas e inmediaciones.
Debe cumplir tus necesidades:
- Selecciona una vivienda acorde a tu familia, que esté dentro de tus posibilidades económicas y que no quede demasiado lejos de tu lugar de trabajo.
Confirma al propietario:
- Comprueba que el vendedor de la vivienda es el único propietario, que la vivienda no esté hipotecada o pueda tener problemas legales.
Comprueba documentación:
- Deberás cotejar datos y comprobar que esté inscrita en el registro de la propiedad del lugar de ubicación del inmueble.
- Comprueba que no existan deudas.
Comunidad de propietarios:
- Infórmate sobre la comunidad de propietarios, que no haya derramas pendientes y que se encuentre al corriente de pagos.